Orígenes

El Corgi galés Pembroke, un favorito de la realeza británica, ha trabajado al sur de Gales al menos desde los tiempos del Domesday book, instigado por Guillermo él Conquistador en el siglo XI. Su trabajo era controlar el movimiento del ganado vacuno mordisqueando sus patas, lo cuales una característica innata como han descubierto muchos protectores de la familia real británica a su costa. Puede haber sido introducido en Gales por los tejedores flamencos quienes se instalaron en el área y cruzaron sus propios perros con los locales, o puede descender del Vallhund sueco. El Corgi galés Cárdigan, más raro, con una historia similar a la del más popular Pembroke, se dice que tiene un temperamento más equilibrado. Se distingue enseguida del Pembroke de cola cortada por su poblada cola de zorro. Los Corgis galeses se exhibieron por primera vez en Gran Bretaña en 1930 y recibieron clasificación diferente en 1934. Ambos tienen los grupos de exhibidores y seguidores más cuidadosos y dedicados del Reino Unido; y sus clases son casi invariablemente de alto estándar.

Carácter y cuidados

Los Corgis son pequeños perros extremadamente activos, fieles, y normalmente buenos con los niños. Son buenos guardianes, y excelentes para exposiciones y competiciones de obediencia. Tienen tendencia a engordar si no hacen el suficiente ejercicio, y sus mantos resistentes al agua necesitan cepillado diario.