|
Orígenes
Ha
habido perros bull en Gran Bretaña desde el siglo XIII, pero
el Bullmastín se desarrollo hace unos 300 años. Es el resultado
de un cruce entre el Mastín,
una antigua raza que peleaba en las arenas de la antigua Roma,
y el Bulldog britáico. Como al Bulldog, se le usó en las
luchas con toros hasta que este deporte se ilegalizó. Fue un
valiente perro de pelea que podía soportar el dolor sin
achicarse. También tenía una gran reputación por su
ferocidad
. Más tarde
los criadores dirigieron su trabajo hacia un tipo que era 60 %
Mastín y 40 % Bulldog. El Bullmastín resultante fue
registrado por el Kennel Club de Gran Bretaña en 1924.
Carácter
y cuidados
A
pesar de su pasado feroz, el Bullmastín de hoy día es un
animal juguetón, fiel y amable, un guardián excelente y
normalmente muy seguro con los niños. No obstante, es
demasiado poderoso para que lo controle un niño o un adulto débil,
y sólo deberían tenerlo los dueños de perros con
experiencia. Necesita que se le acicale cada varios días.
|