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Orígenes
El
noble Borzoi o Wolf Hound ruso se usó en Rusia desde el siglo
XVII para cazar lobos y en las cacerías, un deporte entre los
zares y nobles en la Rusia imperial. El Borzoi rastreaba al
lobo. Al encontrárselo, su tarea consistía en tomarlo por el
cuello y lanzarlo al aire, de esta manera se terminaba con él
rematándolo con una daga.
Originalmente
había varias especies, incluyendo al Borzoi sudanés, el
Borzoi turcómano y el Borzoi tártaro. Sin embargo, fue la
desarrollada en Rusia la que formó la base del estándar
actual,
las otras están extinguidas. Llegó a Gran Bretaña a
mediados del siglo XIX y de allí pasó a América en 1889.
Entonces en 1903, Mr. Joseph B. Thomas empezó a importarlos a
EE UU directamente desde Rusia, siendo su fuente el gran duque
Nicolás Romanoff. La Revolución en 1917 paró su reproducción.
Hasta hace
bien poco, la información sobre el Borzoi en su tierra natal
era muy esquemática. Ahora, los criadores en Rusia parecen
ansiosos de cooperar en la exportación de su estirpe, hay una
base de datos del Borzoi en Moscú, y se puede obtener
información de la
Russian
Cyndromic
Association «Dromos» (sección Borzoi).
Carácter
y cuidados
Se
ha hecho notar en Europa y América como un anima elegante,
inteligente y leal aunque algo reservado, animal
de compañía y bastante popular en las exposiciones. Es ideal
como animal de compañía de un niño ya que es de
temperamento calmo y sociable. Necesita una cantidad
considerable de espacio y ejercicio, solo debe tenerse cuidado
de que, siguiendo sus instintos cazadores, no ataque rebaños.
Sorprendentemente, su manto requiere poca atención.
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